Mi experiencia en el TechCamp de Voces Vitales en Argentina
El martes pasado recibí una llamada de Mariana Massaccesi, de Voces Vitales, mientras llegaba al final de una cola de 3 horas en la Aduana de Retiro, lugar donde ya había sido advertido que no podía usar el celular.
Me gustaría que seas Trainer en el próximo TechCamp en la Embajada de USA, me dijo mientras un guardia gesticulaba enfurecido hacia mí, pero tenes que cancelar tu agenda para Jueves y Viernes. Si, los dos días. ¡Como rechazar algo así!
Mariano, Lili, Belén y todo el equipo de Nobleza Obliga aceptaron asumir muchas de mis responsabilidades diarias, pero como era la primera capacitación con formato Camp que dictaba, me pidieron que enfrente el nuevo desafío con prudencia. Los nombres eran intimidantes.
Voces Vitales Argentina es una fundación dedicada a promover el liderazgo de la mujer como motor para el progreso económico, político y social de toda la comunidad. Al igual que su organización madre, Vital Voices Global Partnership cree esencialmente en el valor transformador de la participación de la mujer en la sociedad. El Capítulo Argentino comenzó en 2009 y ya es una de las organizaciones referentes en liderazgo y capacitación de mujeres empresarias.
El #TechCampArg se realizaba en la residencia del Embajador de los Estados Unidos, y eso implicaba una larga lista de medidas de seguridad y de precauciones con el edificio (declarado patrimonio arquitectónico), que nos explicaron con mucho detalle en la reunión previa, que tuvo lugar el miércoles en la casa de la Agregada Cultural de la Embajada.
Al único Trainer que conocía previamente era a Rudi Borrmann, Director de Innovación y Gobierno Abierto del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, así que decidí copiar todo lo que él hacía. Como él mismo lo dice en su perfil de twitter (@DonRudi) confiaba en su sentido arácnido.
Día 1: Desorientado como perro en bote
A todos los que pasamos los 40 nos cuesta acomodarnos a procesos estructurados, porque hemos hecho lo mismo tantas veces que creemos que estamos haciendo siempre lo correcto, y que lo sabemos todo. Los talleres con formato Camp son una excelente forma de sacarte de tu zona de confort, y de correrte de aquellos lugares comunes del disertante y el auditorio, o del que enseña y el que aprende. En los Camp nada es lo que parece.
Diane La Voy, del Departamento de Estado, presentó el TechCamp e hizo sonar por primera vez su campana (que ya tiene destino de ringtone), que nos acompañó los dos días con la precisión de un relojero suizo. Debo confesar con cierta vergüenza que en ese momento mi único objetivo era sobrevivir.
Imagínense el siguiente cuadro: 85 mujeres, líderes empresarias exitosas (la famosa energía femenina), deambulaban por un Palacio Francés enfrentando a cada uno de los Trainer, para que en 5 minutos (por campana de Diane) les vendiésemos nuestra tecnología, en mi caso el Crowdfunding. Después de 8 grupos de 10 mujeres, ya no sabía lo que estaba diciendo.
El resultado no me dejó conforme. Las emprendedoras se inscribían voluntariamente en las tecnologías que les habían llamado la atención para profundizar en ellas, y veía que los demás Trainer tenían mucho más inscriptas que yo. Me puse triste y melancólico (esto también nos pasa a los mayores de 40)
Pero esa tarde cerramos el día con un desafío. Cada grupo debía generar un proyecto, un problema o una situación imaginaria, que pudiésemos resolverse con la tecnología que liderábamos, y después de una larga reunión donde se analizaron varias alternativas surgió el caso de Fundación Simas, de Mendoza. Un proyecto concreto, con un presupuesto determinado, en un período de tiempo acotado. Estaba en mi salsa.
Me fui a casa pensando nuevas estrategias para conquistar el mundo, y esa noche ganó River Plate, lo que tomé como buen augurio.
Día 2: Rock and Roll Nena!
Nuestro grupo comenzó con mucha energía. Todas tenían experiencia en ONG y en tecnología. También habían estado en las charlas del día anterior.
El grupo original estaba compuesto por Vilma, Adriana, Fabiana, Soledad, Carla, Silvana y Caro. Algunas armaron un equipo para presentar la causa, otras buscaban facilitadores en la comunidad, y con un pequeño grupo comando salimos a hacer el trabajo sucio, robar recursos de los otros grupos
Así llegó Poli, socia de una productora de documentales, que se había anotado en otro grupo pero que la convencimos para que nos ayude con el video de la presentación. Así vino Lu, mi nueva gran amiga mexicana, que oficiaba de relatora del TechCamp, pero terminó redactando (junto a Jennifer del Departamento de Estado) el twit más importante del día (pero eso se los cuento un poco más abajo)
Marilina ofreció sus contactos con Mario Markic. María ofreció buscar el apoyo de artistas y celebridades, y lo hizo esa misma noche! Mariana de Voces Vitales nos ofreció contactos con General Motors, Lorenzo y Alejandro de Ernst & Young comenzaron el TechCamp evaluando emprendedoras para otorgar becas, y terminaron ayudándonos en la presentación final. También participó Natalia, la voluntaria de Voces Vitales, los fotógrafos de la organización, hasta la seguridad. Todos nos daban aliento y nos transmitían una energía increíble.
En ese punto decidimos dar el paso más ambicioso. Nos propusimos sumar a Noah Mammet, Embajador de Estados Unidos en Argentina, a la campaña de Fundación SiMas en Mendoza.
Valeria, de Voces Vitales, y Belen de la Embajada, que también era Trainer en otro grupo, se sumaron a la movida. Todos nos propusimos que el embajador divulgara la campaña en sus redes sociales. Entonces Jennifer y Lu hicieron su magia (mensaje, hashtag, collage de fotos, y el link) Nunca sabré cuanta gente aprobó ese tuit antes de llegar al embajador, pero 5 minutos antes de la presentación final leímos:
Entonces supimos que habíamos logrado el objetivo del TechCamp. 20 personas que apenas se conocían entre ellas, co crearon una Causa Solidaria en apenas 4 horas, articulando el esfuerzo de Personas, Empresas y Gobiernos, para aumentar el impacto social de este proyecto. Me sentí profundamente satisfecho. Esto es el #TechCamp, esto es el #Crowdfunding.
Al final de todo, cuando brindábamos y nos preparábamos para irnos, escuchamos la campana de Diane por última vez. Entonces Ezequiel Glinsky, Director de Microsoft, me miró cansado y me dijo entre risas: No nos quejemos, porque si vos y yo organizábamos este taller, nos quedábamos todos los días hasta las 9 de la noche, debíamos volver el sábado, y nunca hubiésemos tenido las conclusiones a tiempo.
Nobleza Obliga, el que sabe, sabe. Lo que funciona, funciona.
Nota: Muchas de las imagenes que acompañan este post fueron tomadas por la Embajada de Estados Unidos. Muchas Gracias!
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